Hoy te traemos un descubrimiento que nos ha hecho la boca agua. Se trata de Pink’s Madrid sin gluten, un local de hamburguesas cuya sede de la calle Viriato 68 es 100% sin gluten. En pleno corazón de Chamberí, la versión apta para celiacos de la cadena es una auténtica sorpresa y, pese a sólo ofrecer un producto en el menú, te aseguremos que merece la pena la visita.
Pink’s Madrid de Viriato 68 abre todos los días en dos turnos (13 a 16 horas y 20 a 23 horas). El local te sorprenderá por lo pequeño que es, con un toldo rojo en la puerta con el nombre del establecimiento y la inscripción «Premier Burger Joint 100% Gluten Free», que vendría a ser algo así como «sitio de hamburguesas premium 100% sin gluten». Nada más traspasar la puerta te toparás con el mostrador y la cocina vista y el camarero te preguntará si habías estado antes. Tranquilos, que el menú es muy sencillo, ya que sólo tiene un tipo de hamburguesa (y no necesitas más, de verdad).
¿Qué precio tiene la hamburguesa de Pink’s Madrid sin gluten?
En su menú sólo cuentan con la Classic Cheeseburger, que cuesta 8€, y que incluye dos filetes de ternera madurada aplastados, queso cheddar, cebolla, pepinillos, ketchup y mostaza. Puedes elegir quitar o poner algún ingrediente, pero nosotros la tomamos tal cual.
En el local sin gluten de Viriato el pan de la hamburguesa está hecho con brioche y es una auténtica delicia, servido por Casa Brioche, que además son vecinos de zona.
Puedes completar la hamburguesa con patatas fritas (3€ por ración), con doble cocción, lo que las deja muy tiernas, y en dos variedades: con sal marina o con un pimentón con un ligero picante (en palabras del camarero, 3 sobre 10, realmente es un poco menos picante que las patatas fritas cajún del Five Guys, si quieres una referencia).
Las bebidas están entre 2€ (agua o refrescos), 3€ (cerveza) y 4€ (vino en lata). Pero si pides hamburguesa y patatas, la bebida sólo te cuesta 1 euro más, con lo que por 12€ tienes el combo completo.
¿Qué es la smash burger?
Una de las gracias de Pink’s es que la hamburguesa no se parece a ningún otro filete que hayas tomado anteriormente. Literalmente smash burger quiere decir «hamburguesa machacada», y es así como la preparan, tomando una bola de carne picada, apretándola contra la plancha sin aceite, lo que hace que quede crujiente y tengan que rascar el filete de la plancha. Para muestra, un botón:
Corre, que vuelan
El concepto de Pink’s Madrid es curioso: sólo cocinan un número limitado de hamburguesas al día (100 en el turno de día, 100 en el turno de noche). Si se acaban antes, se cierra el local. Por eso en redes sociales se han visto tantas imágenes de colas en sus establecimientos. Y no es para menos.
Por cierto, la cerveza, Península, también es gluten-free en versión de grifo. En definitiva Pink’s Madrid Gluten Free es un local pequeño y coqueto pero con el sabor, familiaridad y trato al cliente de un bar de confianza.
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