¡No te pierdas el video de su conferencia! Seguro que os resulta muy interesante
Para poder entenderlo, debemos hablar del intestino, un órgano infravalorado pero realmente importante al que ya se le empieza a denominar como “el segundo cerebro” ya que tiene una relación estrecha y bidireccional con el mismo. Por ejemplo, cuando estamos nerviosos, los neurotransmisores influyen en el correcto funcionamiento del intestino y por eso nos sentimos «mal de la tripa». Pues lo mismo pasa a la inversa, la microbiota del intestino nos influye en los estados de ansiedad, depresión… El sistema nervioso formado por fibras y redes neuronales del intestino se denomina sistema nervioso entérico.
Partiendo de la base de que el intestino debería ser un órgano casi estéril gracias a diferentes procesos naturales, si estos se ven afectados, podrían provocar la acumulación de bacterias. Uno de estos procesos es el complejo motor migratorio; se trata de unas ondas de contracción que se producen en ayunas, que mueven el intestino para limpiarlo, haciendo avanzar todo lo que haya podido quedar atrás durante el proceso digestivo. El sistema parasimpático estimula la digestión y el simpático inhibe los procesos digestivos, como reflejo a una amenaza por ejemplo, el estrés crónico hace que el sistema simpático bloquee el complejo motor migratorio, dejando que se acumulen las bacterias en el intestino.
En el caso de los celiacos, la primera capa de células intestinal está lesionada, por lo tanto los enterocitos no podrán producir las enzimas necesarias para descomponer los azúcares y esto nos provocará un problema de absorción de nutrientes.
Para tener una noción más completa acerca de este órgano y sus funciones, la doctora Isabel Ojeda nos recomienda el libro “La digestión es la cuestión” de Giulia Enders o el visionado de la conferencia de Ted Talks también de Giulia.
En el caso de ser diagnosticado de SIBO por hidrógeno, el paciente deberá tomar un antibiótico concreto, probióticos, una dieta baja en FODMAP mínimo 2 meses, suplementos de vitaminas y/o hierro dependiendo del estado nutricional de cada paciente, reparación de la mucosa intestinal y procinéticos.
En el caso de SIBO por metano, o por metano e hidrógeno a la vez, deberá tomar dos tipos distintos de antibiótico y luego el proceso sería el mismo que en el caso anterior.
La dieta FODMAP, es decir, baja en azúcares fermentables que son: lactosa, fructosa, galactanos (de las legumbres), fructanos (de cereales y algunas verduras) y polioles de algunas frutas. Aquí podréis encontrar toda la información: www.SIBOinfo.com
En esta dieta, los cereales con gluten están restringidos por lo que crea confusión a la hora del diagnóstico, ya que las personas con SIBO mejoran al dejar el gluten, pero no por ser celíacas, si no porque retiran ciertos alimentos de su dieta.
Sí la prueba diera negativo, entonces se recurriría a una prueba de intolerancia a la fructosa (en este caso también se podría optar a un estudio genético en ciertos casos) y otra de intolerancia a la lactosa. También podría tratarse de un falso negativo por lo que se podría repetir la prueba.
A mi me han diagnosticado celiaquia, pero otro d9ictir dice que es solo sibo. Que puedo hacer?